DEFINICIÓN Y TIPOS.

Las células madre son: ‘’Son aquellas células dotadas simultáneamente de la capacidad de autorrenovación (es decir, producir más células madre) y de originar células hijas comprometidas en determinadas rutas de desarrollo, que se convertirán finalmente por diferenciación en tipos celulares especializados’’. 

De una forma más sencilla, son aquellas células cuyo ‘’destino’’ aún no ha sido definido, se hará posteriormente a través de un proceso denominado ESPECIALIZACIÓN.
Para entender el proceso de especialización celular hay que tener en cuenta que cada célula de nuestro cuerpo tiene en su núcleo todo el material genético necesario (ADN) para convertirse en cualquier otra célula de nuestro cuerpo.
La especialización tiene lugar en el desarrollo embrionario. Una vez fecundado el óvulo, la célula o zigoto comienza a dividirse rápidamente dando lugar a nuevas células. A medida que el cuerpo del embrión se va desarrollando las células deciden en qué tipo celular se van a convertir, es decir, se estaría produciendo la especialización celular el cuál es un proceso irreversible.
El proceso de especialización da lugar a que podamos clasificar las células madre según su potencial de diferenciación en:






  • Célula madre totipotente: Puede crecer y formar un organismo completo, tanto los componentes embrionarios (las tres capas embrionarias) como los extraembrionarios (placenta). Es decir cualquier célula totipotente colocada en el útero de una mujer tiene la capacidad de originar un feto y por consiguiente un nuevo individuo. 
  • Célula madre pluripotente: Capaces de producir la mayor parte de los tejidos de un organismo. Aunque pueden producir cualquier tipo de célula del organismo, no pueden generar un embrión. 
  • Células madre multipotentes: Son aquellas que sólo pueden generar células de su propia capa embrionaria. Estas también llamadas células madre órgano-específicas son capaces de originar las células de un órgano concreto en el embrión y también en el adulto. Un ejemplo de este tipo de células son las contenidas en la médula ósea, las cuales son capaces de generar todos los tipos celulares de la sangre y del sistema inmune. Éstas células madre existen en muchos más órganos del cuerpo humano como la piel, grasa subcutánea, músculo cardíaco y esquelético, cerebro, retina y páncreas. 
  • Células madre unipotentes: Pueden formar únicamente 2 tipos de células madres: Laqilosis que es una célula madre muy rugosa que contienen ribosomas. Y por otro lado, enbofilosis que es una célula lisa que contiene un líquido especial llamado vasiofelina, que ayuda a que el cuerpo no endurezca en la reproducción de las células madre. 

Por otro lado, las células madre también se pueden clasificar según su origen:





  • Células madre adultas: Son aquellas células madre no diferenciadas que tienen la capacidad de "clonarse" y crear copias de sí mismas para regenerar órganos y tejidos. Las células madre adultas más conocidas y empleadas en la medicina desde hace tiempo son las células madre hematopoyéticas , que se encuentran tanto en la médula ósea como en el cordón umbilical del bebé.
  • Células madre embrionarias:Las células madre embrionarias sólo existen en las primeras fases del desarrollo embrionario y son capaces de producir cualquier tipo de célula en el cuerpo. Bajo las condiciones adecuadas, estas células conservan la capacidad de dividir y hacer copias de sí mismas indefinidamente. Los científicos están empezando a comprender cómo hacer que estas células se conviertan en cualquiera de los más de 200 distintos tipos de células del cuerpo humano aunque por el momento no tienen una aplicación médica directa.


PRINCIPALES DIFERENCIAS ENTRE CELULAS ADULTAS Y EMBRIONARIAS
  ADULTAS
EMBRIONARIAS
Pluripotenciales
Multipotenciales
Versátiles
Poco versátiles
Numerosas
Poco numerosas  y repartidas por todo el cuerpo
Fáciles de obtener
Difíciles de obtener
Favorecen el crecimiento celular descontrolado y la aparición del  cáncer
Creciemiento celular normal y sin riesgo tumoral
Se obtienen destruyendo embriones
Se obtienen de tejidos adultos o del cordón umbilical sin necesidad de destruir embriones



 Después de este cuadro observamos que las células madre embrionarias presentan ventajas frente a las adultas sin embargo tienen dos grandes inconvenientes: por un lado favorecen al crecimiento descontrolado celular y provocan cáncer y por otro lado, es necesario la destrucción de embriones para su obtención planteando así un problema ético. 

Finalmente, dentro de esta clasificación podemos encontrar las recientemente descubiertas células IPS de origen artificial.




Son células adultas reprogramadas a comportarse como células madre embrionarias aunque no se sabe si estas células podrían ser utilizadas en los pacientes porque el uso de virus para reprogramar las células adultas predispone las células a cáncer en la mayoría de los casos aunque de todos modos la investigación sigue abierta y como resultado, estas células no podrían de momento reemplazar el uso de células madre embrionarias.